Casi un tercio de la energía que se consume a nivel global, se concentra en el sector industrial. Una cifra muy elevada que, con los actuales niveles de conciencia y exigencia medioambiental, presenta un enorme margen de mejora en términos de eficiencia energética: promover un cambio de paradigma, la conquista de un mundo más sustentable y respetuoso con el medio ambiente.
En el sector industrial podemos encontrar un mundo de infraestructuras, prácticas y elementos que pueden ser mejorados. Por lo tanto, debemos enfocarnos en la eficiencia energética en la industria.
Para que este tercio de energía global consumida sea más eficiente y más verde, existe un concepto único que resume todos los cambios necesarios: la innovación.
La correcta aplicación de todos los avances tecnológicos en todas las partes del proceso pueden representar una ventaja, es un valor añadido para que, poco a poco y de industria a industria, se produzca un cambio progresivo con repercusión en el bien común.
¿Qué entendemos por eficiencia energética y por qué es necesaria?
La eficiencia energética es el intento de utilizar menos energía sin sacrificar las actividades diarias del ser humano.
En otras palabras, es la concretización de un ahorro eficiente de la energía que consumimos diariamente. La eficiencia energética es el “arte” de optimizar el consumo de energía que se produce en los diferentes procesos de negocio dentro de una empresa.
La implementación de sistemas y metodologías que permiten medir y optimizar la eficiencia energética, consiguen reducir este consumo, proporcionando dos valores diferenciadores.
- Diferenciación
Valor diferencial en relación con las empresas competidoras.
La sociedad está experimentando un cambio importante en la conciencia de la protección ambiental. No sólo se exige un producto o servicio de calidad, sino también que sea desarrollado con procesos sustentables que no influyan directamente en la degradación ambiental.
Cada vez más empresas abrazan esta causa y asocian a su imagen de marca a este concepto de sustentabilidad, en el que la reducción del consumo de energía y sus certificaciones desempeñan un papel fundamental.
- Productividad
Medición y reducción del consumo y, por tanto, de los costos.
La energía es un costo que afecta a todos los productos, servicios y negocios, sin excepción.
Específicamente en la industria, los costos de energía son muy elevados, llegando en algunos casos al nivel de los costos de personal, proveedores y materias primas, por lo que invertir en la reducción del consumo de energía es, sin duda, rentable y necesario para mejorar la productividad y la competitividad.
Lea también » 5 Motivos para invertir en Automatización Industrial
Claves para la eficiencia energética en la industria
1. Energy as a service: ahorro garantizado y descarbonización
La base de todas las medidas de eficiencia energética industrial es Energy as a service. Es un modelo de negocio de energía basado en los servicios.
Es decir, no se paga el producto en sí, sino que el cliente paga un servicio mensual fijo de energía que le permite ahorrar mientras está con la empresa y le ofrece las mejores tecnologías.
2. Iluminación sustentable de bajo consumo
Al sustituir el sistema de iluminación tradicional por otras medidas de iluminación eficiente, es posible reducir el consumo de energía en este campo en un 80%. A veces, cuando las medidas se reflejan en la factura de la energía, ya no son necesarios más argumentos.
Recomendamos empezar por considerar la tecnología LED como primera alternativa, un sistema de iluminación con mayor potencial de ahorro, combinado con un sistema automático que permita programar rutinas y controlar la iluminación cuando no está en uso.
Combinando las dos opciones, la empresa podrá reducir drásticamente su factura de energía eléctrica y entrar en la transición energética, de hecho, tal como indica el Acuerdo de París, las empresas que no reduzcan sus emisiones de CO2 en un 45% para 2030, serán penalizadas.
3. Cambio en las fuentes de energía
La energía renovable y, específicamente, la energía solar.
La inversión en energías renovables por parte de la industria contempla diferentes opciones, pero al final de cuentas la fotovoltaica es la más asequible tanto económicamente como en términos de potencial energético.
Confiar en el mercado eléctrico convencional es más arriesgado que invertir en energía solar, ya que las tarifas son imprevisibles y parece que la tendencia al aumento de los precios de la luz ha llegado para quedarse.
Por lo tanto, conseguir la independencia energética es el primer paso para alcanzar la eficiencia energética en cada sector, ya que reduce el consumo de energía de las compañías de electricidad, y al aprovechar las fuentes renovables, es posible gestionar la propia energía y reducir las facturas mensuales.
4. Primera necesidad: optimización de los procesos industriales
El principal consumo de energía en la industria no se debe a la iluminación, como ocurre en una empresa del sector terciario. El mayor consumo de energía se destina a los procesos industriales, operativos y de producción. La maquinaria necesita electricidad en grandes cantidades.
Es por eso que su optimización es fundamental para tratar de reducir al máximo este consumo sin disminuir el nivel de productividad de la industria. Conclusión: obtener un mayor rendimiento energético.
Lea también» 4 Ventajas de las puertas rápidas automáticas para la industria
¿Cuáles son las ventajas de la eficiencia energética en la industria?
Teniendo en cuenta las cuatro claves de la eficiencia energética en la industria, podemos hacer una revisión final de cuáles son sus ventajas:
- Aumento de la productividad: la eficiencia energética consiste en mantener la productividad a la vez que se reduce la energía consumida para realizar los mismos procesos industriales. De hecho, si se ejecuta correctamente, el objetivo es que, al mejorar el rendimiento, aumente la productividad, acabando con los gastos innecesarios.
- Compromiso social e imagen corporativa: Más allá de su introducción de la transición energética y del compromiso con los objetivos de la Agenda 2030 y del Acuerdo de París, la imagen corporativa da un gran impulso al negocio, ya que el cliente valora cada vez más las empresas más sustentables.
- Seguir compitiendo en el mercado: una empresa que gasta menos en la factura de la luz puede invertir en la producción, en el aumento del personal, en mejores tecnologías, etc., y así tornarse más competitiva. Pero es aún más importante considerar que para continuar compitiendo en el mercado, es necesario cumplir los objetivos de reducción de emisiones de CO2 de la ONU, evitando sanciones económicas.
- Ahorrar tiempo y dinero: la eficiencia energética también incluye la gestión de la energía, que permite monitorear todos los procesos y soluciones aplicadas para que alcancen su máximo potencial en todos los momentos y no se pierda dinero ni tiempo con reparaciones atrasadas o reducción de la eficiencia.
¿Hacia dónde va el futuro de la Eficiencia Energética?
El futuro de la eficiencia energética pasa por las tendencias tecnológicas que ya se comienzan a aplicar en este campo. Por ejemplo, la tecnología “IoT” está permitiendo diseñar pequeños dispositivos que captan señales en campo, y a bajo costo a través de protocolos muy eficientes, generando grandes volúmenes de datos dentro de lo que se denomina “Big Data“.
El “Cloud Computing” que tiene, entre otras cosas, la capacidad de autocrecimiento y autoaprovisionamiento de servicios, tiene sin duda mucho que aportar en este área. Las tendencias y herramientas de “Business Analytics” o la introducción de algoritmos de “Machine Learning” que permiten un aprendizaje dinámico y continuo de los procesos de negocio, con base en patrones y correlaciones de datos históricos, permitiendo así realizar previsiones y análisis de información más precisos y anticipados.
Otra tendencia muy interesante es la denominada “Digital Twin” o gemelo digital. Un Gemelo Digital es una réplica virtual de un objeto o sistema. Estas réplicas virtuales son usadas para ejecutar simulaciones antes de que los cambios en objetos reales sean creados e implementados, con el fin de recopilar datos para prever cómo se ejecutarán.
*Este artículo fue elaborado en colaboración con Selectra.
